27 de enero de 2015

Estimula mi mente con palabras, con amor,
con mentiras, con intereses.
Desafiame en todo aspecto que vos pienses,
dejame mostrarte mis colmillos, mi escudo cuando estás por entrar en mí
un escudo que tantas veces creí como salvación pero pone las cosas aún peor.
Llevame por un río de sabiduria, que me estremezca el escucharte
que me excite también, que me duela
el dolor está bien a veces,
 o siempre
                         quizás.
El dolor no está bien, nada nunca está bien ni mal
el dualismo existe y domina, interesate por él alguna vez,
conocelo, entendelo.

Dame una lluvia de drama y de odio, odiame, amame
deseame, odiame, deseame, odiame
o d i o                    d e s e o 
y cuando creas que sea el momento, absorbeme
como una esponja al agua.
Y ahí voy a estar, queriendo entrar en todo lo que sos
a lo que decis,queriendo que te sueltes, soltarte
                                         arrrrte
Nunca te voy a demostrar ni medio sentimiento de lo que en verdad siento o pienso,
pero quereme así,
                           así quereme.
Y cuando menos lo pienses, ya me estarás partiendo la mente
de una manera tan bella (y odiosa) como una obra de Tchaikovsky,
una pintura de Pollock o una bacteria que te mata de a poco sin que uno lo note.

Dejame estragos sin pensarlo.
De verdad, dejalos y no pienses
pensá mucho, pero no pienses, arriesgáte
conmigo, con ella, pero arriesgate, siempre.

No hay comentarios:

Publicar un comentario